El desempleo en la Ciudad se ubicó en 6,3% durante el tercer trimestre
Durante el tercer trimestre de 2025, el desempleo en la Ciudad de Buenos Aires alcanzó a unas 107.000 personas, lo que equivale al 6,3% de la población económicamente activa. Según el relevamiento del Instituto de Estadísticas y Censos porteño (IDECBA), las mujeres representaron el 57,8% del total de personas sin trabajo.
El informe señala que, entre julio y septiembre, la tasa de desocupación se mantuvo sin cambios en comparación con el mismo período de 2024. No obstante, mostró una evolución favorable respecto del segundo trimestre del año, cuando el número de personas desocupadas ascendía a 132.000, con una tasa del 7,7%.
Al observar la dinámica interanual, se advierte una leve mejora tanto en la actividad como en el empleo. La tasa de participación en el mercado laboral aumentó del 54,2% al 55,0%, mientras que el nivel de ocupación pasó del 50,8% al 51,6%.
Uno de los aspectos destacados del estudio es la persistente desigualdad de género. La desocupación femenina se ubicó en 7,4%, superando ampliamente el 5,2% registrado entre los varones. A su vez, se evidenciaron contrastes entre zonas de la Ciudad: el Sur presentó un desempleo del 7,4%, por encima del promedio general.
En cambio, las áreas Norte y Centro mostraron un desempeño laboral más favorable. En esas zonas, las tasas de actividad superaron el 64% y el empleo rondó el 61%. En la Zona Sur, en tanto, estos indicadores descendieron al 57,4% y 53,2%, respectivamente.
El análisis por grupos etarios reveló que la participación laboral es menor en los extremos de edad. Entre los jóvenes de hasta 24 años, la tasa de actividad fue del 27,4%, mientras que entre las personas de 65 años o más se ubicó en 24,4%. Por el contrario, el segmento de 25 a 49 años registró una participación significativamente más alta, del 93,1%, tendencia que también se refleja en los niveles de empleo.
En relación con la estructura productiva, el sector servicios concentró la mayor parte de los puestos de trabajo, con el 73% del total de personas ocupadas. Le siguieron el comercio, con el 14,4%, y la industria junto con la construcción, que en conjunto representaron el 12%.
La subocupación horaria —que incluye a quienes trabajan menos de 35 horas semanales de forma involuntaria— se situó en 8,2%, lo que implicó una reducción de 1,9 puntos porcentuales respecto del año previo. Dentro de este grupo, el 56,6% manifestó no buscar activamente ampliar su jornada laboral.
El informe también indicó que cerca del 75% de las personas ocupadas trabaja en relación de dependencia. De ese universo, el 72,7% realiza aportes jubilatorios, mientras que el 27,3% restante se desempeña sin descuentos previsionales.
Entre quienes actualmente se encuentran desocupados, el 64,2% afirmó haber iniciado su trayectoria laboral antes de los 19 años. La mayoría perdió su empleo por motivos vinculados a la actividad laboral, tanto en el caso de asalariados (75,1%) como de trabajadores independientes (83%).
Por último, el estudio detalló que la mayor parte de las personas sin empleo provenía del sector privado y de actividades relacionadas con los servicios. Se trató, en su mayoría, de puestos de baja calificación y con escasa antigüedad: casi siete de cada diez tenían menos de cinco años en su empleo anterior y más de un tercio no había alcanzado el primer año. Además, una proporción significativa de los asalariados no contaba con registro en la seguridad social.
