Monte Castro: La Plazoleta Vacarezza enfrenta problemas con vandalismo a pocos días de su reapertura
El lunes 16 de diciembre, la Comuna 10 de la Ciudad de Buenos Aires convocó a la reapertura del renovado patio de juegos de la Plazoleta Vacarezza, ubicada en Alcaraz y Virgilio, luego de varios meses de refacciones y cierre por trabajos. Sin embargo, la tan esperada inauguración oficial nunca se llevó a cabo y, a tan solo tres días de la reapertura, los vecinos reportaron que una de las hamacas había sido robada y otra ya estaba rota.
El espacio, que había permanecido cerrado por un largo período, finalmente abrió sus puertas, pero la alegría por las mejoras se vio empañada por hechos de vandalismo. Según los relatos de los residentes de la zona, el lugar sufrió daños tan rápidos como la nueva hamaca, que desapareció misteriosamente, y otra que se rompió poco después de ser instalada.
Vecinos que acudieron a la plazoleta durante la tarde de la reapertura no ocultaron su sorpresa al notar que la inauguración oficial había sido suspendida sin aviso previo. A pesar de la ausencia de este acto formal, los niños del barrio no tardaron en saltar las barreras y disfrutar de los nuevos juegos.
“Habíamos visto la publicación en Instagram y estábamos muy emocionadas de ver la plaza abierta, sobre todo porque esta es la plaza de mi infancia y siempre me preocupó ver cómo se deterioraba. Sin embargo, la inauguración no se realizó, pero al menos los chicos pudieron disfrutar de los nuevos juegos”, comentó una vecina que acudió al lugar con su hijo.
Los comentarios de los habitantes del barrio coinciden en que, más allá de los inconvenientes, estaban felices de ver la renovación del lugar, que incluía nuevos bancos y juegos más modernos. Sin embargo, algunos siguen manifestando preocupación por la falta de seguridad en la plaza.
Preocupación por el vandalismo nocturno y la falta de vigilancia
Las quejas por el vandalismo en la Plazoleta Vacarezza no son nuevas. Según los vecinos, los actos de descontrol, como el robo y la rotura de los juegos, son recurrentes durante la noche. Las denuncias indican que las autoridades locales no han podido frenar estos incidentes.
Algunas personas del barrio sugieren que la única forma de evitar más daños es reinstalar las vallas que rodeaban la plazoleta y permitir que los propios vecinos se encarguen de abrir y cerrar el espacio, garantizando así un control más directo y evitando el ingreso de personas no autorizadas en horarios nocturnos.
“Sabemos que hay grupos que vienen en la noche y destrozan lo que encontramos al día siguiente. Es lamentable, pero hasta que no haya una presencia más fuerte de seguridad, el daño va a seguir”, comentó otra madre, que manifestó su preocupación por el futuro del renovado patio de juegos.
Un llamado a la responsabilidad colectiva
La comunidad de Monte Castro ha estado pidiendo, desde hace años, mejoras para este espacio verde, y muchos esperaban con ansias la reapertura. Si bien las nuevas instalaciones han sido recibidas con entusiasmo, los hechos de vandalismo plantean la necesidad urgente de tomar medidas que aseguren la conservación del lugar.
En resumen, la Plazoleta Vacarezza representa un caso en el que el entusiasmo por la renovación y el esfuerzo comunitario se ven opacados por los problemas de seguridad y vandalismo. Los vecinos de la zona insisten en la importancia de una acción conjunta entre la comunidad y las autoridades para preservar el espacio y garantizar que los niños del barrio puedan seguir disfrutando de un lugar seguro y accesible para su recreación.