Hasta el 7 de agosto se subraya la relevancia de este acto para la salud de los bebés y sus familias. Se realizan encuentros abiertos a la sociedad y capacitaciones para profesionales sobre el tema.
Anualmente, desde el 1° hasta el 7 de agosto, se celebra la Semana Mundial de la Lactancia con el propósito de generar conciencia y promover la acción en torno a la lactancia materna. En esta edición, el lema es: “Impulsemos la lactancia. Apoyando y educando en los primeros 1.000 días de vida”.
En este contexto, los Hospitales públicos y Centros de Salud de la ciudad de Buenos Aires han organizado diversas actividades como talleres y charlas informativas en las salas de espera, dirigidas tanto a profesionales como a la comunidad en general. El objetivo es proporcionar información sobre los beneficios de la lactancia materna y sensibilizar acerca de su importancia para los recién nacidos, como parte fundamental de una adecuada nutrición y salud.
La consigna de este es “Impulsemos la lactancia. Apoyando y educando en el marco de los primeros 1.000 días de vida”
En relación al lema planteado este año, la licenciada Vanesa Valls, coordinadora de la Comisión, explicó: “Nos invita a tomar acción, a promover una alimentación saludable que beneficie tanto a los niños y niñas, como a sus madres, y de manera indirecta, a toda la familia y comunidad”.
Añadió además: “Los 1.000 días abarcan los 270 días de gestación y los 730 días correspondientes a los primeros dos años de vida. Garantizar una nutrición de calidad, cuidados específicos, educación y apoyo adecuado contribuyen al desarrollo positivo de esta etapa tan crucial”.
El objetivo principal es ofrecer información sobre los beneficios de la lactancia y crear conciencia sobre su importancia para los recién nacidos.
La Comisión es responsable de implementar programas de capacitación para los equipos de salud, cursos, ateneos, jornadas y congresos especializados en esta área. También se encarga de recopilar y actualizar datos, asesorar a las instituciones para obtener la certificación como “amigos de la lactancia” y la acreditación de “espacios amigos de la lactancia (o lactarios)” en los hospitales con servicios pediátricos y neonatales.
“La práctica de la lactancia necesita del apoyo de todos los actores en la comunidad y la familia. Por lo tanto, es deber del estado garantizar, a través de leyes y políticas de salud, que sea posible cuando las personas así lo deseen”, afirmó la Dra. Noriko Higa, también coordinadora de la Comisión de la Lactancia. Asimismo, destacó: “Es esencial asegurar un parto respetado, la primera lactancia, la atención especializada en casos de prematuridad, así como la promoción de Espacios Amigos de la Lactancia”.
Finalmente, desde la Comisión de la Lactancia se detallaron los múltiples beneficios de la lactancia para el bebé, la madre, la familia y la sociedad en general.
Para consultas sobre este tema, se encuentra disponible el número de teléfono 136.
Ventajas de la lactancia
Para el bebé:
– Proporciona anticuerpos que protegen contra enfermedades comunes de la infancia como diarrea, alergias, asma y infecciones respiratorias.
– Reduce la incidencia de enfermedades prevalentes en la infancia como diarreas, asma, neumonía, alergias, entre otras.
– Minimiza el riesgo de desnutrición.
– Disminuye de 1.5 a 5 veces el riesgo de muerte súbita (Heyman, Jody, et al, 2013).
– Contiene los nutrientes esenciales para un óptimo crecimiento.
– Es fácil de digerir, lo que reduce los cólicos del bebé.
– Proporciona la hidratación adecuada con los líquidos y electrolitos necesarios.
– Ofrece la mejor biodisponibilidad de hierro, calcio, magnesio y zinc.
– Favorece el desarrollo emocional e intelectual y previene problemas de salud mental en el futuro (APH, 2015).
– Contribuye al desarrollo temprano del lenguaje.
– Tiene efectos a largo plazo en la salud, reduciendo la probabilidad de desarrollar enfermedades crónicas en la edad adulta como obesidad, diabetes tipo 1 y tipo 2, enfermedades cardiovasculares, leucemia e hipercolesterolemia.
– Promueve un mejor desarrollo cerebral que puede influir en el rendimiento académico y en las oportunidades económicas futuras.
– Fomenta un vínculo afectivo con la madre que contribuye a un crecimiento más feliz, seguro y emocionalmente estable.
– Protege contra la caries dental y reduce la necesidad de ortodoncia durante la infancia y adolescencia.
Para la mama:
– Establece un vínculo afectivo madre-bebé, promoviendo el desarrollo de la autoestima, personalidad saludable y niveles elevados de inteligencia en etapas posteriores.
– Facilita una recuperación rápida postparto.
– Contribuye a quemar calorías adicionales, lo que facilita la recuperación del peso previo al embarazo.
– Previene la depresión postparto.
– A largo plazo, reduce el riesgo de osteoporosis, cáncer de mama y cáncer de ovario.
– Minimiza el riesgo de sangrado postparto y, por ende, reduce la probabilidad de desarrollar anemia.
– Estimula la producción de hormonas especiales en el cuerpo de la madre, que fomentan sentimientos de relajación y afecto hacia su bebé.
En la Ciudad, ante cualquier inquietud o dificultad durante el período de lactancia, los residentes pueden acudir a los consultorios de lactancia en los Hospitales Públicos o Centros de Salud más cercanos. Además, tienen a su disposición el número de teléfono 136, un servicio operativo las 24 horas, donde profesionales están disponibles para atender consultas y brindar asistencia. La opción 2 corresponde al servicio “Pediatra en Casa”, mientras que la opción 3 es para acceder a la “Línea mamá”.